Imagina esto: has olvidado el cumpleaños de tu mejor amigo y necesitas un regalo rápido pero considerado. ¿Qué podría ser mejor que sorprenderlo con un vigoroso ramo de flores frescas entregadas directamente en su puerta? Ahí es donde entran en placer las "flores a domicilio". No es solo una cuestión de conveniencia; es un aspaviento sincero